En este caso, el Audi A1 Competition Kit Legends es una personalización estética interior y exterior mediante accesorios originales de la marca y rinde homenaje a los míticos Audi Quattro de los años ´80, que dominaron con mano de hierro el Mundial de Rallyes en los inicios de esa década gracias a la efectividad de su tracción integral quattro y años después también batirían récords en el Pikes Peak, gracias a Michele Mouton o a Walter Röhrl con el Audi S1 en 1987.
Gracias a estos accesorios, el Audi A1 puede recibir una dosis de tuning de fábrica para convertirlo en una añoranza retro, recordando los éxitos de Audi en la competición. Los dos paquetes de personalización, interior y exterior, combinan los colores blanco, gris, rojo y naranja característicos de la marca en competición hace más de dos décadas.
Por ejemplo, el paquete interior cuenta con molduras blancas para las salidas de ventilación, tiradores de las puertas y consola central, junto a un espejo retrovisor interior decorado por su parte posterior y unas alfombrillas con los mismos motivos. La nota más colorista la ponen el volante deportivo de cuero, la palanca de cambios y el freno de mano, con una atrevida combinación en colores negro y naranja.
Si el MINI puso de moda la personalización mediante vinilos sobre la carrocería, este kit exterior para el Audi A1 sigue la tendencia pero se desmarca al utilizar motivos decorativos propios de la marca.
Con unas llantas exclusivas y bandas decorativas en vinilo con colores grises y naranjas, contrastando con el blanco de la carrocería, el A1 parece sacado de una copa monomarca o similar. Para aquellos que gusten del aspecto deportivo pero no quieran renunciar a la discreción, yo me quedo con el pack S line para el A1.
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